La importante decisión de elegir el mejor colchón para su bebé
La selección del colchón más adecuado para nuestro bebé bien merece tomarse un poco de tiempo para investigar acerca de las cualidades y beneficios que presenta cada modelo según los materiales y características que poseen. El punto de partida de esta decisión será el tener en cuenta que los bebés muy pequeños llegan a dormir hasta 18 horas al día, por lo cual la confortabilidad es un aspecto imprescindible en el colchón a elegir; luego debe saberse que los niños de 0 a 6 meses tienen la mayor parte del peso en la cabeza, por lo que requieren un buena estabilidad al estar acostados, pero nunca una superficie muy dura, pues podría llegar incluso a modificar la forma de su cabecita aplanándola en la parte posterior. Es por ello, que durante los primeros meses se debe escoger un colchón de firmeza media o alta, con acolchados o capas extras muy suaves y adaptables.
El equilibrio entre suavidad y firmeza
También se aconseja un armónico equilibrio entre suavidad y firmeza entre otros, preocupados por el denominado síndrome de muerte súbita que, según diversos estudios, se ha visto disminuido cuando los niños descansan en colchones firmes. Con esto en mente se puede decidir entre un núcleo de Foam de alta densidad, que brindará firmeza y esponjosidad con una rápida recuperación de su volumen; un bloque de látex natural, material muy elástico y flexible, pero que también ofrece una buena estabilidad; o un colchón de muelles, que resultara muy cómodo y con gran amortiguación.
Colchones de espuma altamente transpirable, salud para sus bebés
La transpirabilidad es otro aspecto importante, ya que nos ayuda a mantener un colchón limpio y en condiciones higiénicas y saludables, libre de humedad y bacterias que pudieran perjudicar al bebé. Por ello, además de la capacidad de ventilación del núcleo del colchón, se debe complementar con rellenos igualmente transpirables que no limiten la circulación interna del aire, la fibra, guata, viscoelástica, poliéter, tejido 3D y el algodón, son algunos de los componentes que favorecen esta característica.
En todo caso, se debe observar con atención la combinación de los materiales que componen la estructura del colchón y seleccionar el que mejor se adapte a las necesidades de confort de nuestros niños.
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